"Me despojo de mi calidad de blanco"

lunes, 26 de octubre de 2009


Lacalle. El candidato encarará la campaña del balotaje sin "identidades partidarias" | Reiteró que tiene "la mano tendida" a colorados

S. CABRERA / D. ISGLEAS

Ni bien Bordaberry anunció que votará a Lacalle, un estallido de alegría se produjo en la sede de Juan Carlos Gómez, donde aparecieron banderas uruguayas y calcomanías con fondo colorado. Blancos y colorados coordinarán esta semana la campaña.

"Me despojo de mi calidad de blanco" porque "comienza una campaña tremenda", anunció el presidenciable Luis Alberto Lacalle pasada la medianoche. El candidato terminó con la voz quebrada y emocionado. Hoy dedicará el día a descansar y esta semana terminará de acordar con los colorados.

Anoche el clima en la Plaza Matríz cambió radicalmente en minutos: a pesar de haber perdido bancas, Lacalle logró cerrar la noche como una fiesta. Luego de las 20.30 había tensión y rostros serios cuando las encuestadoras advertían que podía haber triunfo en primera vuelta.

En ese momento había apenas unas decenas de militantes y Lacalle aún no había llegado a la sede partidaria, pero sí lo había hecho su compañero de fórmula Jorge Larrañaga, que se cruzó en la puerta con el ministro del Interior Jorge Bruni, que recorría las sedes partidarias.

El primer grito de festejo llegó antes de la hora 21 cuando se anunció que el plebiscito del voto epistolar no obtenía los votos. Unos minutos después llegó Lacalle y, antes de subir las escaleras, afirmó: "Somos gente de lucha. Estamos en segunda vuelta". Arriba, en el primer piso de la sede, lo esperaba su esposa Julia Pou, su hija Pilar y el secretario Nicolás Martínez.

FIESTA. Cuando se confirmó la segunda vuelta, el panorama cambió. Hubo gestos de alivio, rostros distendidos: había un mes más de campaña. Sonó a todo volumen la canción Mira a tu alrededor de Alejandro Lerner y León Gieco. Luego el Baile del Qki y el comando nacionalista sacó cientos de banderas nacionalistas a la plaza y pegotines con el logo de Lacalle-Larrañaga, pero con fondo colorado.

Ya había jolgorio cuando se anunció que la ley de Caducidad no se aprueba. Allí por la pantalla gigante aparecieron José Mujica y Danilo Astori, pero eso fue respondido primero por chiflidos y luego con gritos de repudio. Rápidos, los animadores pidieron que el auditorio gritara "Uruguay, Uruguay" y reclamó "un clima de buena onda".

Hubo silencio sepulcral cuando habló el candidato colorado Pedro Bordaberry. "Hay que ser claro, yo voto al Dr. Lacalle", dijo Bordaberry y allí sí fue festejo total. Unos minutos antes Lacalle había hablado con Bordaberry y éste le anunció que iba a expresarle el apoyo. Volvieron a hablar varias veces más y la intención era que Bordaberry concurriera al Directorio, pero no se concretó debido a que en el Partido Colorado le pidieron "que esperara", dijeron a El País fuentes blancas.

"Ahora todos somos Uruguay", dijo el animador frente a la casa partidaria. Y luego pidieron que se entonara el "feliz cumpleaños" para Bordaberry, pero en realidad el que cumplía años era el ex presidente Jorge Batlle.

FÓRMULA. Con saco pero sin corbata, Lacalle y Larrañaga aparecieron por primera vez en la noche pasada la hora 23 en la sala de convenciones del partido, allí donde hay una foto de Laca-lle de la época de presidente. Se los veía distendidos y alegres y Lacalle tenía los ojos brillosos.

"Somos paz, certeza, seguridad y equilibrio. Una única bandera nos identifica, ella nos cubre y nos iguala". Así termina una declaración difundida por el directorio nacionalista, que además indica que el 29 de noviembre los uruguayos deberán decidir entre "dos modelos distintos en ideas, en experiencia y en estilos" y que, para el Partido Nacional, "solo debe primar el interés de los orientales". Larrañaga presentó a Lacalle como el hombre que, "despojado" de los distintivos partidarios, "pretende ser y será presidente".

Lacalle adelantó que encarará la campaña, no como una lucha entre partidos, sino expresándose por fuera de las "identidades partidarias". El apoyo de Bordaberry es "sin condiciones", ya que hay "una forma parecida de ver el país". Y apuntó que "nadie es dueño de los votos", ya que los votantes "no son una majada".

El ex presidente adelantó que esta semana se "coordinarán acciones" en forma inmediata para resolver los pasos a dar y si los colorados participarán en los actos de Lacalle. El candidato no había hablado anoche con Mujica ni con Tabaré Vázquez.

"El Partido Nacional es el único que puede convocar al diálogo con mayor facilidad", dijo Lacalle. No se pronunció sobre los plebiscitos, aunque dijo que "la gente habló". Y adelantó que -si es presidente- analizará "caso a caso" los pedidos que le lleguen por la ley de Caducidad. ¿Anunciará algún ministro? "Es una pregunta temprana. Lo veremos. Si es conveniente lo haremos", respondió Lacalle. Pero dijo que sí se presentarán los equipos.

"Si el 29 de noviembre resulto electo presidente, renunciaré al Directorio blanco".

"Me despojo de mi calidad de blanco. Ahora comienza una campaña tremenda".

Un festejo íntimo, con la mira en noviembre
Luis Alberto Lacalle celebró anoche en forma íntima, luego de la hora 1, con familiares y amigos cercanos en su casa en Carrasco. Hoy mantendrá contactos políticos, pero sobre todo dedicará el día "a dormir", según dijo a El País.

La estrategia, a partir de ahora, será posicionar a la fórmula blanca como la única capaz de unir. Una declaración emitida anoche dice que al Partido Nacional le guía "un sentido exclusivamente nacional en la acción de gobierno (...), independientemente de cercanías ideológicas". En la declaración nacionalista se dejó entrever por dónde vendrá el discurso de Lacalle: "Reivindicamos la unidad entorno a los problemas de los uruguayos, que no se dividen por color. Las víctimas de la inseguridad y los que no tienen techo, no tienen partido; los niños merecen una mejor educación".

También afirma que los blancos creen en "la integración de los uruguayos y en la cooperación" y no creen "en la lucha de clases como motor de la historia". La declaración incluyó un mensaje para Mujica: "Gobernar es cosa seria. El presidente tiene que conservar el orden y tranquilidad en lo interior y la seguridad en lo exterior".

Pedido de "respeto" por silbido a Mujica
Como brotando de una fuente, a medida que avanzaba la noche y las trasmisiones de televisión confirmaban el balotaje, las enseñas partidarias dejaron paso a la bandera nacional que llenó la Plaza Matriz. "Ahora, noviembre", lucían los carteles que, con el fondo del pabellón patrio, fueron repartidos mientras la fórmula saludaba a la multitud. Luego comenzó la distribución de miles de calcomanías luciendo el nombre de los candidatos con un fondo rojo, en referencia a la campaña para conquistar la adhesión del Partido Colorado.

Luis Alberto Lacalle anunció que una inmensa bandera nacional cubrirá la fachada de la sede partidaria hasta el día del balotaje. Al tiempo de agradecer a los colorados y, en particular, a Pedro Bordaberry, Lacalle pidió "respeto" para José Mujica ante silbidos de la multitud cuando el candidato lo nombró.

"Está la mano tendida", reiteró Lacalle, ya con la mira puesta en la nueva campaña, luego de lo cual fuegos artificiales atronaron en la noche de la Ciudad Vieja.

"Ahora arrancamos iguales", proclamó luego Jorge Larrañaga ante la militancia nacionalista.

elpais.com.uy

1 comentarios:

  1. Anónimo dijo...:

    Pedro Bordaberry hijo de un dictador como siempre lo único que busca es llegar como sea traidor que cambio quiere si se aliada con con Lacalle borracho chorro corrupto pero Bordaberry no se queda atrás lo único que quiere es poder para vender la patria como lo hizo el padre de que cambio habla si ya muestra la hilacha juntandose con los blancos oligarcas que miran al pueblo como si fuera inferiores pero la culpa la tiene la gente que despues no lloren por lo que quieren reflotar

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