En un discurso transmitido por cadena nacional, la Presidenta ratificó la decisión de pagar la deuda con reservas y hasta desafió los fallos judiciales en contra. “Tengo que pagar la deuda y voy a hacerlo”, afirmó.
La presidenta Cristina Kirchner ratificó la decisión de pagar la deuda externa con reservas del Banco Central. “Tal vez mañana se me juzgue, pero mientras tanto tengo que pagar la deuda y voy a hacerlo”, anunció ayer, en la Casa Rosada, al mismo tiempo que la oposición llevaba a los tribunales una denuncia penal contra ella y todo el gabinete y desde otro juzgado, un nuevo fallo –el cuarto desde que empezó esta pelea– ordenaba al Gobierno abstenerse de usar las reservas. El anuncio, que trasluce la decisión oficial de ir adelante a pesar de la ofensiva opositora en el Congreso y la Justicia, fue acompañado por la advertencia de que “estamos ante intentos de destitución”. “La oposición no cogobierna con el presidente”, fue la definición de Cristina. También calificó el rechazo del Senado al nombramiento de Mercedes Marcó del Pont en el Banco Central como una “venganza de la más baja estofa”.
Desde el miércoles, cuando los senadores de la oposición, con el voto de Carlos Menem, tomaron el control del Senado y sacaron en tiempo record un dictamen contra Marcó del Pont, en el Gobierno empezaron a definir que la estrategia a seguir sería la de dar pelea. Uno de los argumentos principales es que si el Poder Ejecutivo queda impedido de pagar a los acreedores externos con reservas, los caminos opcionales que quedarían abiertos serían escabrosos: pedir fondos al exterior a intereses usurarios, ir a un default o usar recursos del presupuesto, lo que obligaría a su vez a recortar el gasto social. El razonamiento es que el freno al uso de reservas no afecta sólo al pago de la deuda, sino que indirectamente pone en riesgo políticas sociales como la asignación universal por hijo o la mejora en las jubilaciones.
Cristina habló por cadena nacional, durante un acto de llamado a licitación para el entubamiento de un tramo del río Salado. La acompañaban el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y buena parte de su gabinete.
Deuda Externa
“No voy a permitir que un juez ‘defaultee’ la deuda”, aseguró la Presidenta en su discurso refiriéndose al fallo con el que ayer la jueza en lo Contencioso Administrativo Claudia Rodríguez Vidal ordenó al Gobierno abstenerse de usar reservas del Banco Central para el pago de deuda. La medida de la jueza ya fue apelada por el Gobierno, y ahora será la Cámara la que deba expedirse sobre el tema, pero mientras tanto la cautelar sigue vigente (ver nota aparte), es decir que para usar las reservas, el Gobierno debería desobedecer a la Justicia.
“Se nos obstruye permanentemente con medidas judiciales; es un abuso de poder. No son los jueces, sino la Presidenta por imperio de la Constitución la que toma estas medidas”, criticó. Y advirtió que si tomara crédito para pagar, “sería pasible de ser condenada por administración fraudulenta contra los intereses del Estado, y no lo voy a hacer. Me marca el Código Penal que ningún funcionario puede cometer actos a sabiendas de que estos actos le van a salir más caros que si hace otras acciones, porque si no estaría administrando fraudulentamente en contra del Estado”.
Por ello, dijo estar “dispuesta a enfrentar la condena de cualquier juez circunstancial de la Argentina, pero no la de la historia”. E insistió: “Tal vez mañana se me juzgue, pero mientras tanto tengo que pagar la deuda y voy a hacerlo”.
Marcó del Pont
Fue uno de los tramos más duros del discurso. “Lo de ayer no fue un acto democrático e institucional”, criticó sobre el dictamen de rechazo de la Comisión de Acuerdos del Senado al pliego de Marcó del Pont, que los legisladores definieron sin escuchar a la funcionaria, “fue el acto de la más baja estofa que recuerdo haber visto en el Parlamento argentino”.
“Estamos ante intentos de destitución evidente de algunos sectores nacionales. ¿Cómo puede verse si no la disposición en menos de media hora, sin derecho a ser escuchada, de una académica del valor de Mercedes del Pont?” La Presidenta reclamó en esta línea a los referentes del antikirchnerismo “bajar el nivel de irracionalidad” porque “las instituciones no pueden tomar un acto de venganza”.
“Destituyentes”
Actúan “sin grandeza ni responsabilidad”, dijo sobre los dirigentes de la oposición, a quienes pidió “que tengan el grado de responsabilidad y patriotismo para entender que en este período constitucional yo soy la presidenta”. “Hay un montón en la fotografía (del miércoles en el Senado), empezando por el vicepresidente de la Nación (Julio Cobos), que quieren ese lugar, lo cual me parece absolutamente legítimo. Sólo les pido que el año que viene, en internas abiertas y democráticas, todos se presenten y sea el pueblo el que decida.”
“No hay cogobierno con la oposición, éste es un sistema presidencialista, que hemos copiado exactamente de la Constitución de los Estados Unidos, si no hay que cambiarlo y poner un gobierno parlamentario.” Cristina desafió a la oposición a que “nos digan cómo pagar la deuda” si no es con fondos del Central, “sin bajar las jubilaciones ni destruir empleo”. “Tal vez quieran que dejemos gente en la calle o haya descuentos de salarios, como hicieron ellos en 2001”, sugirió. Pero enseguida juró que si las propuestas opositoras demostraban ser mejores se comprometía a adoptarlas.
También se refirió al modo en que se repartieron las comisiones en la Cámara alta. “Yo he sido senadora desde 1995 y nunca se vio tal avasallamiento de lo que le corresponde a cada sector político en el seno de las comisiones. ¡Pensar que nos trataban a nosotros de autoritarios y hegemónicos! Sepan que cuando el Frente para la Victoria y el PJ fueron mayoría en las Cámaras siempre se respetó a la oposición los lugares que le correspondían.”
fuente: pagina12.com.ar